RT AQUI PARA EL CAPITULO POR FAVOR, ES PARA SABER YO QUIEN LEE LA NOVELA Y SI MERECE LA PENA SEGUIRLA, CADA CAPITULO ES UN RT DISTINTO:
*Recapitulando*
-Haremos
un trato, ¿Qué te parece preciosa?-Cuestiona.
-¿Cómo sé
que no me mientes?-Pregunto con miedo.
Se
escucha un silencio que me agobia por completo, seguidamente varios golpes como
si algo de cayese al suelo o un impacto contra algo. Luego los gritos ahogados
de mi abuela, a mi abuelo suplicando que no lo hagan. Después de eso silencio.
Me tambaleo cayendo de rodillas al suelo.
-Tienes
exactamente setenta y dos horas para venir a la casa de campo de tus abuelos
queridos.-Carcajea.-De lo contrario los mataré a ellos y ten por seguro que mis
hombres se encargarán de tu novio.
Capítulo
44. - {Let me love you}
Espero
en silencio, pensando cualquier cosa para que este tipo me deje en paz, nos
deje en paz. La llamada aún no ha
finalizado y tengo miedo de que le pase algo a mis abuelos, o a Justin. Dejo
escapar un sollozo.
-Si voy, promete que no le harás
daño a Justin.-Ruego.
-Trato hecho.-Dejo caer un suspiro.-Sólo asegúrate de venir sola, me enterare si le cuentas esto a alguien y ya sabes que pasara.
Dejo soltar un leve "okay" puesto que no tengo otra opción posible. Y entonces Andrew corta la llamada. Me levanto del suelo mirándome en el espejo, mi nariz está roja y mis labios hinchados al igual que mis ojos a causa de todo el tiempo que llevo llorando. Con la toalla me limpio la cara, luego me doy maquillaje disimulando mi palidez y cuando creo que más o menos parezco alguien decente decido salir. Justin está sentado en el sofá viendo la televisión, ¿cuánto tiempo ha pasado? me mira.
-Trato hecho.-Dejo caer un suspiro.-Sólo asegúrate de venir sola, me enterare si le cuentas esto a alguien y ya sabes que pasara.
Dejo soltar un leve "okay" puesto que no tengo otra opción posible. Y entonces Andrew corta la llamada. Me levanto del suelo mirándome en el espejo, mi nariz está roja y mis labios hinchados al igual que mis ojos a causa de todo el tiempo que llevo llorando. Con la toalla me limpio la cara, luego me doy maquillaje disimulando mi palidez y cuando creo que más o menos parezco alguien decente decido salir. Justin está sentado en el sofá viendo la televisión, ¿cuánto tiempo ha pasado? me mira.
-¿Quién era?-Pregunta.
-Una amiga.-Le miento
elevando los hombros.
Quiero decirle lo que acaba
de pasar, de verdad que quiero pero no puedo por el miedo de que les pueda
pasar algo a mis abuelos, a Justin o a cualquier persona que me importase.
Clavo mi vista en sus ojos, esta noche mientras duerma me marcharé y así no tendré
que darle explicaciones de absolutamente nada. Le partiré el corazón pero a lo
mejor si no moría podría contárselo todo, decirle que me fui para protegerle y
él me perdonaría por haberle abandonado. Noto que estoy llorando y Justin también
lo ve desde el sofá. Corriendo se levanta hacia mí y me envuelve con sus brazos
fuertemente, estrechándome contra su cuerpo.
-Hey.-Susurra.- ¿Que ocurre
nena?
Niego con la cabeza rompiendo a llorar, sosteniéndome
en pie gracias a la fuerza de Justin. Odio todo esto.
-Estoy aquí ¿vale?-Anuncia besando mi
frente.-Mírame.
Coge mi cara con sus dos manos suavemente,
sin poner presión, y me dedica una leve sonrisa intentando contagiármela. Pero
no lo consigue, sé que le voy a romper cuando mañana se levante y vea que no
estoy, no vea ni mi ropa ni nada mío, y piense que le he dejado. Me odiara.
Dejo caer varias lágrimas más, que son rápidamente limpiadas de mi cara por los
dedos de Justin.
-No llores mas.-Pide besando mi mejilla.-
¿Quieres salir afuera? ¿Te apetece ir al cine? O si no podemos ver aquí una película,
¿vamos al McDonald? ¿Burger King? ¿Restaurante? También te puedo comprar un
perro, si es lo que quieres, o un gato o...
-Justin.-Le corto riendo, es lo mejor del
mundo.
Sonrío y le beso en los labios
despacio, hasta que ambos pulmones se quedan sin oxígeno.-Solo estoy agobiada
por todo lo que sucede, nada más. Asiente pensativo, intentado comprenderlo.
Luego dirige su vista a mí, ladeando la cabeza.
-¿Entonces no quieres un gato?
-¡Justin!-Exclamo riendo, dándole un
leve golpe en el pecho.
A pesar de todo, sabe cómo sacarme una
buena sonrisa en el peor de los momentos. Agarro el cuello de la camiseta de
Justin y lo atraigo hacia mí para abrazarle. Suspiro en su cuello. En este
momento Andrew nos estaba observando y repugnaba esa idea. Me separo de Justin dándole
la espalda, tengo que hacer las maletas sin que se entere.
-Ryan y Chaz te han echado de
menos.-Empiezo a decirle.-Podrías ir con ellos un rato.
-¿Me estas echando Britt?-Cuestiona
con una pizca de diversión en su voz.-Iré a su habitación un rato y luego vendré
a por ti.
Asiento con la cabeza. Lo había
conseguido, ahora solo tenía un par de horas para recogerlo todo, prepararlo e
irme. Espero paciente a que Justin recoja un par de cosas sentada en uno de los
sofás disimulando que veo la tele aunque lo que ronde mi mente sea en pegar un
brinco en cuanto la puerta se cierre y esté sola.
-Te veo luego.-Anuncia.-Te amo nena.
-Chao.-Me despido.
Y con ese "click", me levanto rápidamente
y corro hacia el armario, tiro toda mi ropa colgada y doblada adecuadamente al
suelo, luego abro las dos maletas sobre la cama y poco a poco, apresuradamente
voy metiendo como puedo toda la ropa, accesorios etc. Afortunadamente, termino
antes de que Justin de vuelva y las puedo dejar abajo al señor de la limpieza
para que me las guarde en su cuarto, por supuesto a cambio de una propina.
Cuando tengo todo listo mi móvil comienza a vibrar en el interior de mi
bolsillo, enseguida atiendo.
-Lo has hecho muy bien Vanessa, te
felicito.-Es él.-Ahora, ¿no te importaría traerme algo de dinero verdad?
-¿Cuánto quieres?-Le pregunto con la voz
casi rompiéndose.
-Unos seiscientos dólares no estaría mal.
-No tengo ese dinero.-Le explico, con la
esperanza de que lo comprenda.-Ni siquiera la mitad, es demasiado, por favor.
-Apuesto a que tu novio si.-Mierda. Hay un
largo silencio.-Apáñatelas, nos vemos.
Y la llamada finaliza.
******
Las doce en punto de la noche. Justin
descansa sobre mí, sujetándome con fuerza como si supiera que me fuera a
marchar e intentara impedirlo. Como puedo, lentamente voy apartándolo a base de
moverme de un lado a otro, hasta que finalmente lo consigo. Aliviada me levanto
enfundándome en unos pantalones grises de chándal y una sudadera, luego
descalza camino hasta el pantalón de Justin que descansa en la silla y extraigo
su cartera. No sé cuánto dinero habrá pero a juzgar por todos los billetes que
son, había seiscientos dólares de sobra. Los meto en mis bolsillos
apresuradamente y agarro las llaves. Esto está mal, odio hacer esto pero es lo único
que podía hacer para salvar a mis abuelos, también a Justin. Sin querer, ante
el nerviosismo mis manos dejan caer el llavero al suelo dando un leve golpe. El
suficiente para que Bieber abra los ojos de golpe alarmado por si alguien había
entrado.
-¿Qué haces?-Exclama frotándose los ojos.
-Nada.-Niego rápida.-Tengo que marcharme.
Sin darle opción a decir nada más, cojo
las llaves del suelo y salgo corriendo por la puerta. Pero él es más rápido y
antes de llegar al pasillo su mano está agarrándome del brazo, girándome para
que le mire.
-¿Dónde te vas?-Pregunta tenso.
Sin apartar la mirada, busco algo para
hacerle dejarme ir pro sea lo que sea le va a doler.
-A casa, yo no puedo llevar la vida que
tienes.-Suspiro, intentando no llorar.-De un sitio para otro, con un loco
intentando matarnos y sin apenas dormir, lo siento.
-No, espera.-Aprieta su agarre más fuerte
en mi.-Podemos irnos donde tú quieras, los dos, puedo cancelar la gira si es lo
que quieres.
No sigas, por favor.
-Lo que quiero es irme.-Le explico, como
si de verdad fuera eso lo que necesitaba.
Sus ojos color miel, comienza a verse
aguados y su boca forma una especia de O sorprendida, pero finalmente pasados
varios segundos suelta mi brazo. No podía llorar ahora.
-Sé que no quieres irte, lo sé.-Murmura
apretando los puños.
-Te equivocas.-Le digo cruzándome de
brazos.
Acomodo mi bolso y veo de reojo por
el ventanal el taxi esperándome, tengo que marcharme ya o no llegaré a tiempo,
entonces todo se irá por la borda. Justin vuelve a acercarse a mí, pero esta
vez pegando su frente contra la mía.
-No me dejes.-Susurra con los ojos
cerrados.
Entrelaza nuestras dos manos y entonces,
siento la presión en mi dedo del anillo que me dio. Si se lo daba entendería
que ya no quería absolutamente nada con él. Tenía que hacerlo. Despacio, con
ayuda de mis dedos me lo saco y lo coloco en su palma, cerrándola en un puño.
Alzo la cabeza hacia arriba y veo como una lágrima está recorriendo su mejilla.
-Adiós.
Le doy un apretón en el brazo y luego, doy
media vuelta recogiendo las maletas que el conserje me tiende nada más verme.
Me aseguro de que tengo el dinero que Andrew me pidió y luego tras comprobarlo,
salgo del hotel, adentrándome en el taxi que me llevaría al aeropuerto, y de
ahí a casa de mis abuelos. Ni siquiera sabía si iba a volver a Justin otra vez,
tenía bastante claro que iba a morir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario