Personas que sueñan conmigo:

29 de septiembre de 2013

Capitulo 29.-{Let me love you}

RT AQUI PARA EL CAPITULO POR FAVOR, ES PARA SABER YO QUIEN LEE LA NOVELA Y SI MERECE LA PENA SEGUIRLA, CADA CAPITULO ES UN RT DISTINTO:
*Recapitulando.*
Agarra mi mano fuertemente cosa que me extraña, así que me separo para mirarle frunciendo el ceño, ¿algo iba mal? Traga saliva, apretando la mandíbula, luego inspira y expira soltando todo el aire que estaba reteniendo. Me mira, la nuez de su garganta se mueve hacia arriba. Parece incluso nervioso por algo.
Capítulo 29.- {Let me love you}
-¿Quieres ir a dar un paseo?-Pregunta al fin.
-Está bien.
Asiento con la cabeza, agarrando su mano extendida. Han cambiado la canción y ahora la gente baila un poco más lento juntando sus cuerpos, así gracias a ello podemos pasar atravesándolos con muchísima facilidad sin tener que ir empujándolos a todos y molestándolos. Justin tira de mi mano abriéndose paso; sus amigos desde una esquina de la sala tomando varias bebidas le hacen gestos de, por lo que yo interpreto, animo. ¿Qué va a pasar? nada malo espero, Justin era mi amigo, confiaba en él. Llegamos a la puerta de salida y salimos afuera, donde hace bastante fresco. Me froto los brazos proporcionándome algo de calor, a lo que Justin me mira.
-¿Tienes frio?-Asiento.-Ten.
Suelta mi mano y se despoja de su chaqueta negra, me la da quedándose sólo en una fina camiseta de tirantes blanca. 
-No, entonces te helarás tú.
-Nena, no me hagas discutir ahora.-Rueda los ojos.
Se acerca a mí agarrando uno de mis brazos, mete la manga de la chaqueta por este y luego repite el mismo proceso con mi brazo izquierdo hasta que finalmente, tengo su chaqueta puesta. Sonrío.
-Ahora vamos.-Dice.
Vuelve a coger mi mano para andar despacio por la calle, varias bolsas de papel ruedan a nuestro lado y las hojas de los arboles comienzan a caer por el viento, pero excepto por eso, no hay ningún ruido. Todo está en sumo silencio, nadie pasea por allí, a excepción de nosotros claro. No hablamos, solo andamos hacia nosé donde. Justin aprieta mi mano fuertemente, suspira y se para en seco delante de un escaparate de ropa y otras cosas. Por unos minutos deja los ojos cerrados, luego los abre mirándome fijamente. Un escalofrío me recorre toda la espina dorsal.
-Vale, ya.-Dice.
Frunzo el ceño confundida, mirándole intentando descifrar expresión alguna de su cara pero sólo encuentro nerviosismo en ella, cosa que no entiendo. Agarra nuestras dos manos, empujándome sin hacerme daño,  contra el cristal que hay detrás de nosotros, no entiendo nada. Por mi cabeza pasan un millón de cosas, ninguna coherente.
-Justin, ¿pasa algo?-Pregunto mordiendo mi labio inferior.
-¿Cuánto hace que nos conocemos?-Pregunta él, pellizcándose el puente de la nariz.
-Dos meses y medio, más o manos.-Le respondo tragando saliva.- ¿Ocurre algo Justin? me estas asustando.
No responde, suelta una leve sonrisa nerviosa. Me estremezco. Suspiramos los dos a la vez y sonrío ante la coordinación que hemos tenido; apreto fuertemente mi labio inferior entre los dientes. Justin agarra mi mano izquierda elevándola en el aire.
-¿Sabes?-Encarno una ceja.-Una vez me dijeron que, una vez que encuentras la mano que estabas destinado a sostener, no la puedes dejar ir. 
Gira su cara a un lado para mirar ahora nuestras manos alzadas en el aire pero sin tocarse por escasos milímetros, entonces la acerca y entrelaza nuestros dedos. Ahora me mira a mí, con los ojos mieles algo más oscuros.
-Creo que la he encontrado.-Murmura con voz ronca.
Sonreímos los dos a la vez, creo que eso va por mí. Carraspea para aclararse la garganta un poco. Entonces ocurre, rápidamente pero a la vez despacio agarra mi cintura con su mano derecha cerniéndose totalmente a mi delgado cuerpo. Nuestros alientos chocan, al igual que nuestras narices se rozan. Cierro los ojos para analizar la situación pero no hay tiempo para eso, sus labios ya están tocando los míos presionándolos fuertemente. Enseguida respondo, agarrándome a su cuello para profundizar el beso. Soltamos nuestras manos. No me lo puedo creer. Su lengua pide acceso en mi boca y no se lo niego. Mis manos suben por su cuello y tiro de su pelo, gruñe. Los pulmones urgen de oxigeno pronto, pero no quiero separarme. Justin se aferra a mi cintura con más consistencia y yo sonrío, porque parece un sueño. Muerde mi labio inferior y nos separamos. Enseguida se inclina para besar de nuevo mis labios rápidamente. 
-Contigo no quiero un lio de una noche.-Murmura pegando nuestras frentes.
-¿Enserio?-Encarno una ceja poniéndome de puntillas para darle un casto beso en los labios.
-Enserio.-Asiente sonriendo mientras me derrite pasando la lengua mojando sus labios.- ¿Quieres ser mi...novia?
-No.-Digo riendo levemente, frunce el ceño confundido y agarro su camiseta acercándole a mí, pues se había apartado.-Pues claro que si quiero.
-Eso pensaba.-Sonríe.
Se inclina rozando nuestros labios, ni aun hacia dos minutos que nos habíamos separado y ya añoraba ese contacto. Podría acostumbrarme a esto toda una vida, oh sí. Nos separamos una vez que nuestros pulmones reclaman oxigeno urgentemente.
-Vamos.-Agarra mi mano.-Estos se preguntaran dónde estamos.
Asiento y me separo del cristal de la tienda que me ha servido de apoyo todo este tiempo. Justin agarra mi cintura mientras caminamos hacia el local donde todos están celebrando mi cumpleaños; varias personas pasan a nuestro lado y nos dedican una gentil sonrisa. No sé si es porque saben que es Justin Bieber o por la felicidad que en estos instantes irradiamos. Me da igual, él ahora es mi novio, ¡guau! mi novio, hasta se me hace raro decir que él es mi novio. Ni en un millón de años podría imaginar que esto pudiera ocurrir. A los pocos minutos llegamos al local y entramos, la gente aún sigue bailado y yo inmediatamente imagino como pueden estar los pies de cada uno de los presentes. Justin aprieta mi cintura y elevo mi cabeza para mirarle.
-Por unos instantes pensé que dirías que no.-Confiesa.
-Bueno.-Me encojo de hombros.-Ya ves que te equivocabas.
Ríe negando con la cabeza y se inclina para dar un casto beso a mis labios. Cuando nos separamos puedo ver por el rabillo del ojo como todos los amigos de Justin, también Débora y Kian, se dirigen hacia nosotros corriendo. Genial.
-¡¿Ya?! ¡¿Por fin?!-Grita Chaz desde la distancia alzando sus brazos.
-¡Se acaban de besar!-Le responde Ryan.- ¿Tu qué crees tío?
Carcajeo, se acercan a nosotros y cada uno nos da un gran abrazo.
-Me alegro que estéis juntos.-Dice mi amiga Debi.-Enserio.
-Si bueno.-Exclama Christian.-Si le llegas a decir que no te pego, Justin ha estado de un pesado insoportable estas dos semanas porque pensaba que lo mandarías a la mierda.
-¡Eh tío eso es confidencial!-Exclama Biebs pegándole en el hombro.
Ahí empieza una pelea amistosa entre mi novio y Beadles a lo que todos miramos sin evitar reírnos. Kian, el novio de mi amiga, me felicita por lo de Justin y estamos un buen rato hablando. Es un buen chico sin lugar a dudas y para Debi, el perfecto. Después de un buen rato charlando nos acercamos todos a la barra para pedir algo de beber, todos estamos secos. También bailamos un poco y Justin sube al escenario para cantar varias canciones, tomamos varias fotos que son subidas por Alfredo al Instagram y yo no dejo de sonreír ni un instante, no puedo estar más feliz. A eso de las dos de la mañana la gente empieza a retirarse y nosotros también, pues estamos bastante cansados; Justin se encarga de encontrar a alguien para que limpiase esto.
-Te voy a echar de menos.-Murmura Debi despidiéndose.
-Y yo, tenemos que encontrar algún hueco para hablar eh.-Le aviso.
-¡Por supuesto!
Nos abrazamos y se mete en el taxi que le llevará al aeropuerto para marcharse a Chicago dónde se ha comprado una casa con Kian. Nosotros seis nos subimos a la furgoneta que Kenny trae para recogernos y en unos pocos minutos llegamos a casa, Melanie en silencio abre la puerta y entra la primera  adentro. Creo que está algo cabreada.
-Bueeeeeeeeeeno.-Dice Chaz.- ¿Alguien tiene hambre?
-Yo me voy a dormir.-Le digo soltándome de los brazos de Justin.-Voy muerta.
-Pues yo me muero de hambre así que te hago compañía.-Dice Ryan.
Christian directamente se tira al sofá quedándose allí durmiendo profundamente. Subo a arriba para ponerme el pijama:
asdfgh
Y después de eso me meto en la cama con la lamparita de la mesa encendida, quiero quedarme un rato leyendo todas las miles de interacciones que me llegan desde Twitter tras haber subido una foto con Justin besando mi mejilla. Algunos mensajes son malos y otros hermosos.
-¿Qué haces?-Pregunta alguien, mi novio, asomándose por el marco de la puerta.
-Nada.-Le digo guardando el móvil.-Buenas noches.
Ladea la cabeza mirándome con una expresión divertida, se acerca a mí con paso lento y se sienta a mi lado. Lleva unos pantalones de chándal grises algo bajados dejando ver sus boxers azul marino. Acaricia mi pelo.
-Te quiero.-Murmura.
-Y yo.-Le respondo ronca, sonriendo.
-Hasta mañana.
Se inclina y besa lentamente mis labios. Luego apaga la luz y sale de la habitación, ahora era cuando me despertaba y todo resultaba ser un sueño, pero no era así, estaba sucediendo de  verdad.
--------------------------------------------------------
Ea pues ya está el capitulo, espero que os haya gustado porque ha sido muy sfgashjfklas y eso. Muchas gracias por leer y algunas que habeis recomendado mi novela tambien os lo agradezco millones. ¡Un besazo!
PD: SI LEÍSTE EL CAPITULO NO TE OLVIDES DE DARLE RT AL LINK QUE HAY JUSTO DEBAJO DE LA IMAGEN DE ARRIBA DEL CAPITULO. GRACIAS.

26 de septiembre de 2013

Capitulo 28.-{Let me love you}

RT AQUI PARA EL CAPITULO POR FAVOR, ES PARA SABER YO QUIEN LEE LA NOVELA Y SI MERECE LA PENA SEGUIRLA, CADA CAPITULO ES UN RT DISTINTO:
*Recapitulando*
Agarro el sobre, lo deposito debajo de mi almohada en mi cama asegurándome de que va a estar ahí y tras ponerme el pijama, voy hasta la cama de Justin. Él ni aún ha subido, lo oigo abajo hablar por teléfono con alguien y no puedo evitar escuchar un poco de esa conversación.
"Si, estaba en su cama....no.....es lo mejor, se lo he dicho....estoy deseando que llegue mañana...muy nervioso...que va....hasta luego."
No sé con quién estará hablando pero le ha contado lo de la carta, no le doy más vueltas y quito la sabana para después meterme en el interior de la cama de Justin. Cierro los ojos fuertemente y me sumo en el más profundo de los sueños.
Capitulo 28.-{Let me love you}
El despertador del móvil suena. Mierda, se me olvidó desconectarlo para que me despertase, hoy era sábado con lo cual no tenía que despertarme temprano. También era mi cumpleaños. Me miro en el espejo de enfrente, aún estoy en la habitación desordenada de Justin así que recojo un poco varias prendas que hay por el suelo junto a varios papeles de lo que parece ser canciones. Leo varias, "heartbreaker" está entre una de ellas y no puedo evitar soltar una pequeña sonrisa, pues los amigos de Justin me habían contado que nuestro compañero Biebs estaba volviendo loca a sus Beliebers porque no sacaba la canción, siempre era y es un gracioso "soon". Y ahora tenía la letra entre mis manos; sin perder más tiempo dejo el papel en la mesa del escritorio y hago la cama, luego voy hasta mi cuarto buscando entre mi armario algo que ponerme. Finalmente encuentro esto y decido que para estar en casa es lo más adecuado:
sdfghj



Bajo al salón, no hay absolutamente nadie en la casa, soló el silencio y yo. Me preparo el desayuno tranquilamente consumida en mis propios pensamientos, mientras espero a que la leche se caliente en el microondas reviso mi móvil por si acaso hay algún mensaje y sí, tengo varias menciones en twitter de gente de mi instituto felicitándome, también tengo una llamada en el buzón de voz de mi tía, la escucho y esbozo la segunda sonrisa mañanera:
"¡Hola mi vida! ¿Cuantos cumples ya? ¿Dieciocho? ¡No me lo puedo creer! sí parece justo ayer que corrías por el pasillo de mi casa con apenas unos tres añitos, en fin, pásatelo muy bien cariño y espero verte pronto, hace mucho que no nos haces una visita y tu primo pequeño ya te echa de menos. Diviértete mucho que te lo mereces, felicidades de tu tío, mías y de Iván y David, te queremos."
Le envío un mensaje dándole las gracias, de mis tres tías esta ha sido la que siempre se ha preocupado por mí así que le tenía bastante cariño. Guardo el móvil y cojo el tazón de leche caliente, me siento en una de las sillas rojas y enciendo la tele, están poniendo un "top 50 mejores canciones" y me quedo a verlo, total, no tengo nada que hacer. Menudo cumpleaños.
Después de casi dos horas salgo de la cocina y subo hasta la habitación de Justin para coger su guitarra y cantar varias canciones, entre ellas as long as you love me y be alright, las únicas que me sabia de mi amigo a la perfección. Mi teléfono empieza a sonar dentro de mi bolsillo, lo saco viendo que es mi amiga, menos mal que al menos me ha llamado.
-¡Hola!
-¡Felicidades a la más guapa del mundo!-Grita.- ¿Cómo llevas el día? siento no poder estar ahí.
-Muchas gracias, bueno.-Me encojo de hombros aun sabiendo que no me puede ver.-Sola en casa, aburrida, bastante bien la verdad, ya sabes.
-Siento no estar ahí.-Dice en modo de disculpa.-Pero pronto nos veremos.
-Eso espero.-Le respondo carcajeando.
Oigo como de fondo le llaman, así que eso significa que se acabó la llamada.
-Tengo que pirar, ya hablamos.
-Si.-Ruedo los ojos.-Adiós.
-¡Chao!
Y cuelga, me espero un rato escuchando el pitido que hace cuando cortas una llamada. No tengo nada que hacer, son las doce de la mañana así que bajo a ver un rato de nuevo la televisión, después me cocino unos macarrones que son simplemente calentarlos pues habían sobrado del otro día y después de eso me tumbo en el sofá hasta quedarme completamente dormida. Para cuando despierto son las seis en punto de la tarde, encuentro varias llamadas en mi móvil de varios familiares, ya los llamaré luego, me levanto y acudo al baño para arreglar un poco mi pelo revuelto. Tras recogerlo en un moño alto y firme, ordeno un poco mí cuarto y entonces, llaman al timbre varias veces seguidas, como unos cuatro toques. Bajo en silencio hasta abajo, Justin me ha avisado mil veces de que no abriera la puerta así que antes de girar el manillas asomo mi cabeza por la mirilla, pero no hay absolutamente nadie. Qué raro. Espero un poco por si acaso, como unos cinco minutos, pero nada,  al final decido abrir y a mis pies, encuentro una caja de un tamaño mediano color blanco con un lazo gris envolviéndolo, también hay una nota encima de la tapadera. Me agacho para cogerla y leerla:
"Y aquí empieza la magia, espero que te guste. Con cariño, tu amigo y compañero."
Oh dios mío no me lo puedo creer, alucinando agarro la caja entre mis manos para pasarla adentro; la pongo sobre la mesa del salón y a la velocidad de la luz la abro, es un vestido, hay otra nota dentro.
"Seguro que estás preciosa con esto."
Por lo que doy a entender, es que me lo tengo que poner así que corro a mi cuarto para vestirme con este precioso vestido que me han regalado:
dfghjk

Una vez que lo llevo puesto, recibo un mensaje al móvil de desconocido que me indica una dirección pero está relacionado con el primer regalo porque habla acerca del vestido así que, bajo mi sospecha de quien puede ser, agarro mi bolso y salgo por la puerta, voy hasta la dirección indicada pero sólo es una vieja calle sin nada interesante, me empiezo a asustar de que no sea quien yo creo que es. Un señor me llama.
-¡Eh chica!-Volteo mi cabeza.- ¿Eres Vanessa Britt?
Rápidamente me dirijo a él, el tipo es un vendedor que está en la calle intentando vender perritos calientes. Asiento con la cabeza y del bolsillo se saca una pequeña caja con un sobre, me la da para que la abra. ¡Unos pendientes! le miro con la boca abierta sin saber que decir.
-¿Quien ha hecho todo esto?-Exclamo, varias mujeres que pasan por mi lado ocultan una risita.
-No le puedo decir señorita.-Se encoge de hombros.-Buena suerte.
Me regala una sonrisa y leo la carta, es otra dirección al a que tengo que ir. Corro hasta ella lo más que dan mis pies, tengo que preguntar a varias personas cómo llegar hasta ella porque no tengo muy claro las calles de Seattle pero finalmente llego y hay en cada farola una flecha coloreada de morado hasta una tienda de mascotas; nerviosa por todo esto entro. Un hombre del mostrador se acerca a mí con algo detrás de las manos sosteniendo su mirada en la mía.
-Em.-No sé qué decir.- ¿Usted tiene algo para mí? es que bueno...me han guiado hasta aquí, no sé quién es....
Dios, creo que nunca en la vida había podido sonar tan tonta pero el muchacho no se ríe de mí, menos mal.
-No se equivoca.-Dice.-Tengo algo para ti.
Se acerca hasta una pequeña jaula dónde hay tres perritos de raza labrador y saca uno color canela, el más pequeño que había. Lo miro estupefacta, ¿es enserio?
-Para usted.-Sonríe.
Lo deja entre mis brazos extendidos junto con otra pequeña nota que lleva el perro encajado en su collar rojo. El hombre me dice que puedo venir luego a por él, porque es mío, es un regalo de cierta persona que no quiere desvelar su nombre. Pero yo creo que ya se quién es. Abro el sobre, de nuevo otra dirección pero esta vez más cercana a dónde me encuentro. El reloj ya marca casi las ocho de la tarde. Me despido y salgo por piernas hasta la nueva calle que me indica la carta. Es una floristería, una mujer mayor de la tienda me tiende una rosa roja acompañada de una sonrisa; pero esta vez no hay nota.
-¿Justin bieber ha hecho todo esto?-Pregunto ilusionada.-Sabes quién es, claro.
-No puedo desvelarte nada.-Ríe.-Pero pronto sabrás quien es.
Pongo mis brazos a cada lado de mi cintura, ahora ya no sé adónde ir. El vestido, los pendientes, el perro y ahora la rosa, ¿enserio? es que sonaba tan irreal que me estaba replanteando pellizcarme el brazo para asegurarme de que estaba despierta.
-Feliz cumpleaños.-Susurra alguien en mi oído.
Del sobresalto, giro mi cuerpo entero para toparme con unos marrones color miel enfrente de mí, lo sabía desde el principio, estaba segura de que era él. No digo nada, porque no me sale la voz ni siquiera de la emoción, sólo me limito a mostrar una estúpida sonrisa. Luego, me lanzo a los brazos de Justin.
-Gracias.-Murmuro en su oído.
Nos separamos y él me mira de arriba a abajo, la señora que me ha entregado la rosa nos mira con una amplia sonrisa. De seguro estoy colorada. Justin agarra mi mano entrelazando nuestros dedos.
-¿Vamos a dar un paseo?
Asiento rápidamente con la cabeza, tira de mí y empezamos a caminar por la amplia calle, mi amigo llega una gorra de beisbol junto con unas gafas enormes para, por lo que yo intuyo, no ser reconocido por nadie. Andamos mirando al suelo los dos, tengo tanto que decirle que no sé ni cómo empezar, no me puedo creer que él me haya hecho todo esto, el, justo él. Suspiro.
-Ese suspiro es de enamorada.-Dice apretando mi mano mientras me mira sonriendo.
Le devuelvo la sonrisa enseñando mis dientes, claro estúpido estoy enamorada de ti grito en mi interior.
-¿A dónde vamos?-Le pregunto curiosa.
-Son las ocho y media.-Responde mirando el reloj de su muñeca izquierda.-A las nueve podemos ir a tomar algo si quieres, invito yo.
-Me parece bien.
Quiero pellizcarme el brazo para asegurarme de que no estoy soñando pero aguanto mis ganas. Poco a poco vamos entablando una conversación, Justin comienza a hacer bromas, yo rio como una loca y a ratos nos ponemos serios porque la gente nos mira, no queremos llamar la atención. Finalmente cuando llegan las nueve empezamos a dirigirnos a un establecimiento que desconozco pero que mi compañero asegura ser excelente y que merece la pena ir. No queda muy lejos de donde nos encontramos menos mal.
-Enserio, podemos quedarnos en casa de Melanie.-Le digo una vez que llegamos.-No hace falta que te gastes más dinero en mí, de verdad.
-Te lo mereces.-Me responde rodando los ojos.
No discutimos más, pasamos adentro del local y hay como dos puertas, una en la que hay un especie de recibidor muy pequeño dónde no se encuentra nadie, y luego enfrente otra marrón puertecita. Justin suelta mi mano para abrirla. Pasamos a dentro, todo está en sumo silencio. Entonces de repente un montón de gente sale de detrás de varios sofás que hay, de un escenario que está montado al final de la sala y de todos los sitios posibles. La mandíbula se me desencaja.
-¡FELICIDADES VANESSA!-Gritan todos los presentes.
Un montón de globos de diferentes colores plateados comienzan a salir de la nada llenando la sala, la gente aplaude No me lo puedo creer, Justin aún permanece a mi lado sonriendo de oreja a oreja. Mi amiga Débora sale de entre todos corriendo hacia mí a pesar de unos altos tacones que viste, y me da un abrazo.
-Muchísimas felicidades cerda.-Exclama.
-Gracias, he estado toda la mañana aburrida y ahora esto.-Digo emocionada.-No me lo creo.
Se encoge de hombros mirando a mi compañero, la gente empieza a dispersarse por la sala cogiendo bebidas de una barra que hay con un camarero. Christian, Chaz, Ryan y por detrás, con una cara larga Melanie, se dirigen hacia mí para darme un cálido abrazo.
-¿Qué? ¿Te gusta?-Pregunta Beadles emocionado mientras frota mis hombros.
-Si.-Asiento.-No lo esperaba, enserio.
Justin, que tenía agarrada mi mano izquierda, la suelta y se va con varios amigos suyos de color negro que lo llaman con las manos. Después de varias felicitaciones de gente me adentro en la sala acompañada de mi amiga Debi para coger algo de beber. Una vez que estamos allí paradas tomando un licor que no recuerdo el nombre, un chico bastante delgado y algo, de piel morena, se acerca a mi amiga rodeándola por la cintura. Ella alza la cabeza plantándole un casto beso en los labios.
-Es Kian.-Me explica encogiéndose de hombros.
-Encantada.-Le digo estrechando su mano.-Ya era hora.
-Pues si.-Suspira.
Reímos, nuestros vasos se acaban así que pedimos otro. De seguro todo esto lo ha pagado Justin y por un momento me siento bastante mal; ya se lo compensaría con algo. La noche va transcurriendo, hay gente que no conozco pero que Biebs si, también hay varias chicas de mi instituto que eran buenas amigas, todo va perfecto. El mejor cumpleaños. Todos bailamos al ritmo de "We can't stop", hay varias muchachas que se atreven a subir al escenario que hay montado y hacer el llamado Twerking, dios, es alucinante.
-¡Vamos Vanessa sube!-Me grita Justin desde la otra punta.
También está bebiendo, seguro que algo más fuerte de lo que estoy tomando yo. No para de reír, le miro sonriendo pero seguidamente le saco el dedo de en medio. Los que nos han visto comienzan a  carcajear.
-¡Era una broma!-Vuelve a decirme.
Reímos. Sigo disfrutando de la fiesta, a las once de la noche entran varias personas con comida, lo que viene a ser la cena, que está deliciosa. La música resuena en mis oídos, en todo lo que llevamos de tiempo desde que hemos entrado no he hablado con Justin, a excepción de cuando me había animado a hacer Twerking delante de todos. Y realmente quería hablar con él, agradecerle por todo esto. Pero ahora mismo no sabía ni donde se encontraba. Suena Burn, la gente empieza a saltar a pesar de que acaban de comer y yo, junto a mi amiga hago lo mismo. Estoy tan cansada, el día parecía que iba a ser totalmente aburrido y ahora, me encontraba celebrando mi cumpleaños con un montón de gente, bailando y bebiendo, riendo y disfrutando. 
-Eh.-Me avisa Débora.-Por ahí viene Justin.
Volteo mi cuerpo entero y sí, en efecto lo veo haciéndose paso entre toda la gente para llegar hasta mí. No aparta la mirada de mis ojos ni un momento; mi amiga poco a poco se va yendo hacia atrás para encontrarse con su novio y bailar un poco. Empiezo a avanzar un poco hasta él para acortar la distancia. La gente que se mueve sacudiendo sus cuerpos nos obstruye el palo, pero finalmente conseguimos estar frente a frente.
-Hola.-Dice.
-Hola.-Le digo yo, sonriendo.
-¿Te lo estás pasando bien?-Me pregunta inclinándose para que pueda oírle.
-¡Genial!-Grito.-Muchas gracias Biebs.
Alzo mi mano para revolverle el pelo, entonces, me inclino para rozar mis labios contra su mejilla. Agarra mi mano fuertemente cosa que me extraña, así que me separo para mirarle frunciendo el ceño, ¿algo iba mal? Traga saliva, apretando la mandíbula, luego inspira y expira soltando todo el aire que estaba reteniendo. Me mira, la nuez de su garganta se mueve hacia arriba. Parece incluso nervioso por algo.
-¿Quieres ir a dar un paseo?-Pregunta al fin.
----------------------------------------------------
Por dios, ocho paginas en el Word loco, no os quejareis de que es corto vamos. Bueno, espero que os haya gustado porque la verdad que yo creo que ha quedado bien, si, por una vez no digo que ha sido una mierda y espero que vosotras penseis igual. En el proximo capitulo creo que ya sabeis lo que va a pasar ¿no? afahjkg en fin, pero ATENCION, sólo lo subiré si en lo del link para dar RT en twitter hay al menos 22 RTs ¿si? y ya está. Un besazo muy grande, comentadme que eso siempre me anima un poco y que espero que os haya gustado chicas.
PD: SI LEÍSTE EL CAPITULO NO TE OLVIDES DE DARLE RT AL LINK QUE HAY JUSTO DEBAJO DE LA IMAGEN DE ARRIBA DEL CAPITULO. GRACIAS.
PD2: Bueno, la verdad es que las visitas ultimamente han bajado un poco y eso me deprime asi que, la verdad si pudierais de alguna forma "promocionar" la novela os lo agradeceria millones, muchas gracias.


22 de septiembre de 2013

Capitulo 27.-{Let me love you}

RT AQUI PARA EL CAPITULO POR FAVOR, ES PARA SABER YO QUIEN LEE LA NOVELA Y SI MERECE LA PENA SEGUIRLA, CADA CAPITULO ES UN RT DISTINTO:
*Recapitulando*
-NARRA JUSTIN-
Vanessa era totalmente diferente, como Sandy; en el fondo eran exactamente iguales. Suspiro acercándome a la barandilla dónde podía verla desde arriba durmiendo.
-¿Me dejarías amarte?-Pregunto, sabiendo que no voy a obtener respuesta.
A lo mejor, podría esforzarme un poco con ella e intentar ver que soy otra persona diferente, que de verdad podía y quería hacerla feliz. Que no era un asesino sólo, y tampoco un cantante adinerado. Justin y sus mil caras, pienso.
Finalmente después de estar un par de minutos más me retiro a dormir.
Capitulo 27.-{Let me love you}
-NARRA VANESSA BRITT-
Después de una semana todo más o menos se estaba de alguna forma arreglando, no más peleas con Justin ni tampoco con Melanie, tampoco habían señales de Andrew o sus amigos asesinos cerca y realmente, se podía respirar aliviadamente. Septiembre, suspiro, estábamos en Septiembre donde todo el mundo comenzaba las clases, todos menos yo, y aunque suene tonto me gustaría seguir estudiando, ir a la universidad y todas esas cosas que me iba a perder, porque nadie había dicho nada y tampoco iban a dejarme ir ante la situación en la que estoy metida. También mañana era mi cumpleaños y me gustaría salir con mi amiga Débora un rato aunque sea para contarle todo con detalle. Suspiro mientras cierro el armario de la habitación después de haber colocado varias camisas que Justin me había regalado, ni aun sabia  el porqué de ese regalo pero no me daba explicaciones.
-Bú.-Exclama alguien detrás de mí agarrándome de la cintura.
En menos de un segundo, casi estoy enganchada a la parte de arriba del armario a causa del susto pero sólo es Biebs divirtiéndose un rato. Le miro mientras ríe y me contagia la risa. Pasa la lengua por sus labios y me derrito interiormente, pero esbozo una mirada fulminante como si aquello me hubiera molestado. Aún tiene sus manos a cada lado de mi cintura.
-No ha sido gracioso.-Digo ladeando la cabeza.
-Oh sí que lo ha sido.-Asiente mientras se separa, agarrando sus manos con las mías.-Vamos a ir a ver una película al cine todos, ¿quieres venir?
-No me apetece mucho la verdad.-Le explico dirigiéndome a la esquina de mi cama para sentarme en ella.
-En ese caso.-Se encoge de hombros.-Me quedaré contigo.
Le miro estupefacta, estos últimos días había estado algo raro pero únicamente conmigo, algo más amable y divertido de lo normal. Pero tampoco lo he tenido mucho en cuenta.
-Vete con ellos si quieres.-Le animo.-Yo veré aquí una película.
-O podemos verla los dos.-Se encoge de hombros.
Finalmente como sé que no voy a poder hacerlo cambiar de opinión acepto su petición, a lo que él responde con un: "se lo diré a los chicos" totalmente emocionado mientras me agita por los hombros. Después de eso sale corriendo por piernas hacia abajo dejándome así algo de intimidad para pensar; cojo mi móvil y le mando un mensaje a Debi: "¿Qué te parece si vamos mañana a celebrar mi cumple por ahí? de paso puedo conocer a Kian." al minuto me responde dejándome totalmente decepcionada: "Lo siento pero no voy a poder, ya hablamos." No me lo puedo creer, algo cabreada dejo el móvil en la mesa dándole un golpe en la parte trasera, salgo de la habitación dejando la puerta entornada y bajo hacia abajo donde están los chicos colocándose sus respectivas chaquetas para marcharse. Las diez cuarenta y cinco de la noche. Suspiro metiendo mis manos en los bolsillos del pantalón de chándal gris.
-¿Seguro que no queréis venir?-Pregunta Chaz.
-Sip.-Respondo yo balanceándome con mis pies.-Divertíos.
-Igualmente.-Dice Christian mostrando una sonrisa pícara hacia mi amigo Justin.
Cogen varias cosas más entre ellas el dinero para pagar las entradas, y luego con agitando las manos se despiden. Estamos solos. Lo miro y me está mirando. No puedo evitar sonreír.
-¿Qué película quieres ver?-Pregunta adentrandose hacia el salón.
-Spring breakers.-Le digo caminando hacia él.
-No.-Niega frunciendo el ceño.- ¿Viernes 13?
-Ni loca.-Exclamo.- ¿LOL?
-Aburrida.-Rueda los ojos acercándose a mi.- ¿El muñeco diabólico?
-¡¿Por qué de miedo?!
Se encoge de hombros riendo, al final después de discutir otras cinco películas más decidimos ver la primera que mi amigo había propuesto, "Viernes trece". La pongo en el DVD mientras Justin apaga todas las luces junto con las cortinas que dejan filtrarse la poca luz de la calle que las corre hasta tal punto que no se ve absolutamente nada. Me siento en el sofá agarrando una manta entre mis finas manos para ponérmela sobre el pecho cubriéndome hasta el cuello cómo si aquello fuera un escudo de protección. Enseguida, con ayuda de la pequeña luz del móvil, Justin viene hasta mi lado robándome una pequeña porción de manta para ponérsela sobre las piernas. La película ya ha comenzado, unos chicos están en una especie de bosque donde al parecer se van a quedar allí a acampar, genial pienso en mi mente. Miro de reojo a Justin, que observa atento la película sin pestañear, me acurruco un poco más haciendo rozar nuestros hombros, cosa que me provoca un escalofrío. En unos minutos más, el malo de la película sale de entre los arboles matando a una pareja de novios que se encontraban dentro de la tienda de campaña; cubro mi cara, especialmente mis ojos, con mis manos para no ver más. Justin en cambio parece estar disfrutando.
-Nena, no pasa nada.-Dice tranquilamente.-Es sólo una película.
-Acaban de matar a tres personas.-Sollozo.
Él solo se limita a reír, pero rodea mis hombros con su grueso brazo atrayéndome hacia él dejando así mi cabeza apoyada en su pecho, así podía respirar su aroma como si de una droga se tratase. La película va transcurriendo hasta que finalmente después de casi dos horas finaliza con la muerte de todos los protagonistas, yo me encuentro ahora tumbada completamente con la cabeza reposando en las piernas de Justin mientras acariciaba mi pelo. Suspiro, odio las películas de terror. Tengo los nudillos blancos de tanto aferrarme a la manta con fuerza.
-No ha estado mal.-Murmura mi compañero.
-Creo que no voy a poder dormir.-Digo retirando varios mechones de pelo que me molestan por la cara.
-Mañana estaré todo el día fuera.-Dice.-Tengo que hacer varias cosas con los chicos.
No puedo evitarlo, una espina de tristeza y desilusión se clava en mis entrañas, pensaba que se quedaría por ser mi cumpleaños. A lo mejor ni lo sabía puesto que no le había dicho nada, pero tampoco quería obligarle a estarse con migo así que asiento con la cabeza y me levanto de sus piernas. Comienzo a encender todas las luces una por una hasta tener la casa completamente iluminada, la tele ya está apagada y el silencio reina entre nosotros.
-Puedes venirte.-Dice Justin.-Si quieres.
-No gracias.-Le muestro una sonrisa falsa.
Asiente con la cabeza mientras mira el techo consumido profundamente por sus pensamientos, no quiero interrumpirle pero finalmente lo hago informándole de que ya es tarde y me voy a dormir. Aún con miedo tras la película subo las escaleras lentamente de una en una hasta llegar a mi cuarto, dónde me encuentro la puerta abierta de par en par con un sobre en el lado de la cama. Eso no estaba ahí, digo en mi interior mientras me acerco despacio. Lo cojo entre mis manos observándolo detenidamente, es de color beige con dos esquinas del sobre algo arrugadas, parece antiguo. Rápidamente rasgo la parte superior del sobre para así poder sacar el contenido de su interior y para mi más grata sorpresa es una foto en blanco y negro de lo que parece ser un matrimonio joven. Pero lo que me deja alucinada es que esos son mis padres de jóvenes en lo que parece ser una feria, pues se ve la noria de fondo; mi padre presenta una sonrisa resplandeciente mientras está rodeando a mi madre por la cintura, la cual tiene un pequeño bulto en la barriga, esta foto sería cuando tendrían unos veinte años más o menos. Ese bulto era yo, estaba embarazada de mí. Abro los ojos de golpe, ¿qué hacía esto aquí? aún hay más, una pequeña nota se encuentra detrás de la foto. La cojo y leo detenidamente: "¿Qué pasaría si tú no fueras la que está en su interior? ¿Qué pasaría si aún ellos siguen vivos? y tú no lo sabes? ¿Y si tu vida ha sido toda una mentira?"
No me lo puedo creer, seguramente sería una especie de broma estúpida sin ninguna gracia que alguien me ha hecho. Meto todo de nuevo en el sobre con la bilis subiendo por mi garganta, me dirijo hacia abajo corriendo hasta que llego a Justin, que está tomando un vaso de agua en la cocina.
-¿Cómo puedes ser tan gilipollas?-Exclamo tirando la carta a su lado.- ¿De dónde has sacado esa foto?
-¿Pero qué dices?-Me responde haciéndose el confundido.-No sé de lo que hablas.
-Seguro.-Ruedo los ojos reprimiendo varias lágrimas.
Señalo con la mano dónde he tirado el sobre, lo coge abriéndolo cuidadosamente y sacando su contenido. Espero paciente a que lo lea, analice o lo que sea que esté haciendo. Una vez que lo hace me mira casi igual de sorprendido que yo.
-¿No tienes nada que decir?-Escupo.-Discúlpate al menos.
-Vanessa, esto no lo he escrito yo.-Dice sin apartar la mirada de mis ojos.- ¿Dónde lo has encontrado?
-Estaba en mi cama, no lo sé.-Le respondo ya agobiándome.
-Bien, no pasa nada.-Intenta relajarme.
Se acerca a mí y me abraza, no dice nada, simplemente estrecha mi delgado cuerpo contra el suyo transmitiéndome calma. No quiero llorar, porque una vez que empiece sé que no voy a parar pero así no puedo; tengo ese nudo en la garganta.
-Dejémoslo estar.-Dice suspirando.-Al menos por dos días, luego tú y yo investigaremos para averiguar quién ha dejado esto ahí ¿sí? lo más posible es que alguien quiera reírse de ti.
Asiento con la cabeza, ¿mis padres vivos? ¿Mi vida entera una mentira? suena totalmente irreal, era imposible que mis padres estuvieran por ahí en alguna parte del mundo viviendo una vida normal sin mí. Es más, yo había asistido a su entierro, yo los vi muertos. Suena el reloj. Las doce en punto. Me separo de Justin limpiando con el dorso de la mano varias lágrimas que mojan mis mejillas. Mañana iba a pasar el día de mi cumpleaños totalmente sola, como casi todos los años.
-Buenas noches.-Me inclino y beso su mejilla.
Agarro el sobre, lo deposito debajo de mi almohada en mi cama asegurándome de que va a estar ahí y tras ponerme el pijama, voy hasta la cama de Justin. Él ni aún ha subido, lo oigo abajo hablar por teléfono con alguien y no puedo evitar escuchar un poco de esa conversación.
"Si, estaba en su cama....no.....es lo mejor, se lo he dicho....estoy deseando que llegue mañana...muy nervioso...que va....hasta luego."
No sé con quién estará hablando pero le ha contado lo de la carta, no le doy más vueltas y quito la sabana para después meterme en el interior de la cama de Justin. Cierro los ojos fuertemente y me sumo en el más profundo de los sueños.
----------------------------------------------------------------------------
Vale, pegadme porque ha sido un capitulo bastante corto, mierda y aburrido, pero es que he empezado las clases y no tengo tiempo, aparte la inspiración no está mucho de mi parte pero en el próximo capitulo habrá algo entre Vanessa y Justin, eso segurísimo asdfhajk. En fin, dejadme algún comentario y tal. Os quiero.

PD: SI LEÍSTE EL CAPITULO NO TE OLVIDES DE DARLE RT AL LINK QUE HAY JUSTO DEBAJO DE LA IMAGEN DE ARRIBA DEL CAPITULO. GRACIAS.
PD2: Bueno, la verdad es que las visitas ultimamente han bajado un poco y eso me deprime asi que, la verdad si pudierais de alguna forma "promocionar" la novela os lo agradeceria millones, muchas gracias.

11 de septiembre de 2013

Capitulo 26.-{Let me love you} Maratón

RT AQUI PARA LOS TRES CAPITULOS DE LA MARATÓN POR FAVOR, ES PARA SABER YO QUIEN LEE LA NOVELA Y SI MERECE LA PENA SEGUIRLA:
*Recapitulando*
-NARRA JUSTIN-
-Como vuelvas a llamarme asesino.-Gruño.-Juro que te dejo en mitad de la carretera y me importa una mierda lo que te pase, ¿entendido?
-¡Mejor que estar contigo sería!-Grita enfurecida.- ¿Sabes lo que te digo? que me bajo ya.
Se gira desabrochando su cinturón a la velocidad de la luz y casi sin darme tiempo a reaccionar abre la puerta del copiloto y sale disparada corriendo hacia la oscuridad sin mirar atrás. Maldigo interiormente por mis palabras y quito las llaves del coche para salir a buscarla, no llevo ninguna linterna ni nada así que me tengo que guiar por la luz que me proporciona el móvil. 
Capitulo 26.-{Let me love you} Maratón
-NARRA VANESSA BRITT-
Corro todo lo que dan mis pies esquivando los árboles que se me cruzan de frente, no sé dónde voy exactamente, solo sé que no quiero volver a ver a Justin, si que lo quieres ver, estás deseando que venga a por ti ahora mismo grita mi subconsciente. Me paro secando algunas lágrimas que nublan mi vista, el cielo está completamente oscuro, no hay luna llena y  no se ve absolutamente nada. En menudo lío que me he metido, respiro hondo mirando a todo mí alrededor pero no sé por dónde salir. Busco mi móvil pero no lo encuentro, seguramente me lo he dejado en casa con las prisas. No sé qué hacer, pienso pero no se me ocurre nada. Oigo un ruido de pasos ligeros hacia mí así que salgo corriendo hacia la otra parte del bosque en el que me encuentro; salto las piedras que se interponen en mi camino junto con varios troncos y la herida de mi pierna empieza a pinchar de dolor pero no me paro.
-¡Sé que estás por aquí!-Grita, y creo que ese es Steve.
A lo mejor Justin le ha importado una mierda de verdad y se había ido ya, o a lo mejor esta esperándome con el coche porque sabe que tarde o temprano iba a volver. Tropiezo con el tacón y caigo al suelo, los pasos se aproximan más rápidamente hacia mí e intento quitarme los zapatos para correr más rápido, una vez que lo consigo me levanto. Puedo percibir la respiración de alguien rozando mi nuca pero no me detengo, cruzo unos setos arañándome los brazos pero no lo suficiente para hacerme corte. De repente, alguien agarra mi vestido por atrás tirándome contra un árbol mientras me tapa la boca, no puedo ver bien. 
-Sh, soy Justin.-Susurra.-No grites.
Aparta su mano lentamente de mi boca, pero la va pasando por mi mejilla derecha limpiando varias lágrimas con el dedo, despacio la baja pasando por mi cuello y rozando mi brazo hasta llegar a mi mano y así entrelazar sus dedos con los míos. -Vámonos a casa, ahora enserio.
 -¿Esta Steve aquí?-Pregunto tragando saliva.
 Asiente con la cabeza, pero parece no importarle mucho el hecho de que me está buscando, no sabía que él era amigo de Andrew y ni mucho menos que quería matarme pero ahora, me arrepentía de haberle llamado ante mi arrebato de niña chica. Suspiro, rápidamente me hace un gesto con el dedo para indicarme silencio y vamos atravesando los arboles con cuidado alumbrando el suelo gracias a la poca luz que proporciona el móvil de Justin. Finalmente conseguimos llegar sin ningún problema hasta el coche dónde todas las farolas alumbran la calle con una luz amarilla; gracias a eso puedo ver cómo por mi pierna corre un rastro rojo de sangre. Trago saliva y me pongo completamente pálida. Se me ha abierto la herida.
-No es nada.-Dice Justin arrancando el coche.-Lo curaremos al llegar a casa tranquila.
Asiento con la cabeza mirando por la ventana las estrellas ignorando el fuerte pinchazo del corte, tengo que relajarme. Mi compañero enciende la radio para evitar el silencio algo incómodo, suena "Let me love you" de Ne yo y no puedo evitar sonreír.  "Si me dejas puedo ayudarte con todo esto, déjame amarte" dice la canción, ¿podría yo ayudar a Justin con todos los problemas que tiene encima? ¿Me dejaría amarle? suspiro hondo dirigiendo mi vista a él que mueve sus dedos golpeándolos contra el volante al compás de la música.
-Eres la persona más insensata que he conocido en mi vida.-Dice.-Pero me gustas así.
Ríe y yo me contagio a su risa, dos meses y no ha habido ningún día tranquilo desde que le conocí. Niego con la cabeza volteando los ojos recordando lo nerviosa que estaba la primera vez que lo iba a ver, y ahora me ponía nerviosa cada vez que rozaba su mano con la mía. Después de un largo trayecto llegamos a la casa de Melanie, nadie está despierto puesto que son casi las dos de la mañana y todas las luces están apagadas; la herida de mi pierna sigue sangrando y mi quejido hace que Justin se percate de ello.
-Ven.-Murmura cerrando la puerta de la entrada.
No sé muy bien lo que hace, deja las llaves en el recibidor y se acerca a mí, rodea con uno de sus brazos mi cintura y pasa el otro por debajo de mis piernas, impulsándome hacia arriba quedando así contra su pecho. Como cuando una pareja de recién casados llega a la casa y el novio coge a la novia en volandas, pienso. Me conduce hasta el sofá dejándome con cuidado y besa mi frente apretando sus labios en ella.
-Enseguida vengo.
Asiento con la cabeza incapaz de hablar, al poco de varios minutos vuelve con varias vendas pidiéndose de rodillas a mi lado, ya que estoy completamente tumbada en el sofá. Muerdo mi labio inferior preparada para cuando pasa una gasa untada de alcohol por la herida, escuece.
-Deja de morderte el labio.-Murmura.-Me distraes.
Lo libero de entre mis dientes, cuando Justin termina de vendar nuevamente mi pierna por segunda vez se aparta recogiendo todo sumido en sus más profundos pensamientos y me deja ahí, sin decir absolutamente nada. Estoy tan cansada que apenas puedo aguantar con los ojos por más tiempo, me recuesto y poco a poco voy quedándome dormida. A veces era tan raro que no parecía de este mundo....
-NARRA JUSTIN-
Esto no puede estar pasando, sacudo la cabeza mientras camino descalzo hasta la habitación donde duermen Chaz, Christian y Ryan que está al lado del cuarto de baño de la planta de arriba, abro su puerta silenciosamente y entro en el cuarto. Enciendo todas las luces, completamente nervioso.
-Levantad, ya.-Exclamo.
-¿Qué ocurre?-Murmura Chaz colocándose la almohada por encima de la cabeza.- ¡Tío!
Agarro unos cojines se los arrojo dando de lleno en sus cabezas, pero nada hace que se despierten.
-Si no os levantáis, juro que os quito la comida que ponen en mis conciertos y no la coméis más.-Aviso.
Enseguida todos están erguidos en la cama con los ojos abiertos de par en par, carcajeo y me siento en una de las sillas que hay. Me rasco la nuca pensando en lo que voy a decir, no sé ni siquiera si es lo que siento.
-¿Qué opináis de Vanessa?-Pregunto encarnando una ceja.
-Guapa.-Contesta Christian.
-Simpática.-Le sigue Chaz mirando al techo.
-Te gusta, ¿verdad?-Cuestiona Ryan sin responder a mi pregunta.
-¡No lo sé!-Exclamo exasperado.-Es sólo que, esta noche, no lo sé tíos pero no me gusta este sentimiento.
-Aw que el nene se ha enamorado.-Dice Christian poniendo voz de chica, haciendo una mueca.-Ya era hora man.
Suspiro, es que tampoco quiero enamorarme de ella, nunca antes había llenado tanto mi corazón desde Sandy y nadie nunca podría reemplazarla, jamás. Mis piernas tiemblan, suerte que estoy sentado.
-Si te gusta, deberías decírselo...-Me aconseja Ryan pasando las manos por su pelo.-A ella le gustas.
Pero estoy metido en tantas cosas que no sé si ella querría estar con alguien así, pienso. Y estaba seguro de que yo no era su tipo para nada. 
-No.-Exclama Chaz.-No pienses tío, te conozco.
-Ya es hora de que alguien ocupe tu corazón.-Razona Ryan.-Sandy es pasado.
-Vanessa nunca la va a reemplazar.-Les digo, mordiendo el interior de mi mejilla.-No lo sé tíos.
Todos los tres me miran ladeando la cabeza sin poder evitar reír, les encanta verme confundido a los muy estúpidos. Finalmente rio.
-Perdio' en la confusión, como una ilusión.-Digo.- ¿Qué hago?
Mi amigo Christian se levanta de la cama caminando hasta mi lado posando su mano en mi hombro derecho.
-Te ayudaremos man.-Dice.-Pero ahora fuera, son las dos de la mañana.
Como veo que ahora no están para hablar, salgo de la habitación agitando mis brazos con frustración. Enfrente está Melanie durmiendo, porque ha dejado la puerta abierta y una porción de su cuerpo asoma por ella, sólo era diversión de una noche, pero nada más. En cambio Vanessa era totalmente diferente, como Sandy; en el fondo eran exactamente iguales. Suspiro acercándome a la barandilla dónde podía verla desde arriba durmiendo.
-¿Me dejarías amarte?-Pregunto, sabiendo que no voy a obtener respuesta.
A lo mejor, podría esforzarme un poco con ella e intentar ver que soy otra persona diferente, que de verdad podía y quería hacerla feliz. Que no era un asesino sólo, y tampoco un cantante adinerado. Justin y sus mil caras, pienso.
Finalmente después de estar un par de minutos más me retiro a dormir.

 -------------------------------------------------------------------------
Iba a hacer cuatro capitulos pero al final se quedan en tres, asfgashj lo siento no ha habido beso pero esque he preferido que sea así pero para el capitulo 30-32 ya pasaran cozitaz de estas sfsaghfjak ¿si? bueno, que espero que os haya gustado y eso, comentadme pls y no os olvideis de dar RT ¿si? es muy importante. MUCHAS GRACIAS POR LEER.