Personas que sueñan conmigo:

12 de diciembre de 2013

Capitulo 49.-{Let me love you}

RT AQUI PARA EL CAPITULO POR FAVOR, ES PARA SABER YO QUIEN LEE LA NOVELA Y SI MERECE LA PENA SEGUIRLA, CADA CAPITULO ES UN RT DISTINTO:
https://twitter.com/ohdarlingbiebs/status/411184185257099265
*Recapitulando*
 -Vanessa.-Susurra Justin en mi oído.
 Luego, comienzo a verlo todo borroso y un dolor enorme me recorre todo el cuerpo. Bajo la vista mi mano esta manchada de sangre, de mi sangre. Luego, a pesar de que Justin intenta cogerme caigo al suelo golpeándome la cabeza fuertemente y pierdo la visión. Solo oigo gritos, disparos, ruidos y el mundo cayéndome encima, los latidos de mi corazón disminuyendo. Sonrío, había salvado a Justin.
Capítulo 49.- {Let me love you}
Mis ojos, me arden al igual que mi cabeza. Los intento abrir pero la sensación es como si me los hubieran cosido para impedirme abrirlos, quiero gritar pero no me sale la voz y mi cuerpo no reacciona cuando quiero levantar el brazo o la pierna. Pero sí oigo las voces de una mujer hablando tranquilamente con un chico, intento concentrarme para entender lo que dicen pero me es imposible. De repente, un destello blanco me ciega y en vez de estar cayendo al vacío me encuentro en un bosque lleno de árboles tan altos que parecen infinitos y un cielo oscuro, lleno de nubes negras. Hay una chica joven de aproximadamente mi edad columpiándose en un balancín y como no veo a nadie por allí decido acercarme a ella dudosa.
-¡Hey!-La llamo.
La muchacha gira la cabeza mostrándome una sonrisa, tiene unos ojos color azul preciosos y una melena rubia que le llega hasta la cintura. Se levanta del columpio para acercarse a mí.
-¿Sabes que hago aquí?-Le pregunto mirando alrededor.
-Te han disparado.-Me responde balanceándose hacia delante y atrás.-Has dado tu vida por Justin.
De repente, un montón de imágenes pasan a la velocidad de la luz por mi cabeza como una secuencia y comienzo a recordar absolutamente todo. Andrew me engañó para llevarme hasta él. El chico Gabe. Melanie. La gasolinera. Justin. Andrew quiere matar a Justin. Yo me pongo delante. Recibo el disparo. Mi corazón deja de latir.
-¿Estoy muerta?-Murmuro ahogándome con mis propias palabras.
La chica de pelo rubio se queda mirándome por unos instantes sin decir nada, luego se ríe como una colegiala y mira hacia el cielo negro, que se está despejando mostrando un reflejo de la cara de mi padre junto con la de mi madre.
-Ahora es cuando elijes quedarte o irte con ellos.-Dice haciéndose a un lado.
Por unos segundos me veo abrazando a mi padre, diciéndole lo mucho que le he echado de menos y besando a mi madre repetidas veces en la mejilla, pero por otro instante también me veo a Justin mostrando una sonrisa falsa a todos lados que va, lo veo solo y perdido, ya había perdido a Sandy para perderme a mi también. Él había estado para mí cuando no tenía a nadie.
-Me quedo.-Le digo a la muchacha, que me mira impaciente.
Al decirle eso, me muestra una sonrisa satisfecha y luego vuelve a la misma posición en la que la había encontrado. El cielo vuelve a oscurecerse de nuevo, es como si me estuviese envolviendo a mí. Después, no sé cuánto tiempo pasa, pero por fin siento algo  en mi cuerpo. Intento abrir mis ojos pero siento un tremendo dolor y lo dejo en el intento. Pero sí que puedo oír voces del exterior, no distingo de quienes son pero sé que una es segurísima de una mujer y la otra de un chico. Pasados unos minutos hay un leve silencio. Siento unas suaves caricias en mi mano derecha.
-Hola.-Habla una voz masculina.-Los médicos dicen que estás mejorando notablemente y no sabes lo feliz que me ha hecho oír eso, también dicen que a lo mejor puedes oírme.
El chico se detiene, ese chico no es desconocido para mí, era Justin. Aprieta mi mano con un poco de fuerza, aunque con el miedo de hacerme daño.
-Ryan está bien, ¿lo puedes creer? mañana le dan el alta, solo ha estado dos jodidos días aquí.-Un momento, ¿dos días? ¿Tanto tiempo estaba inconsciente?-Espero que tú también te pongas mejor Vanessa.
Vuelve a suspirar por una tercera vez más, ojala pudiera mover aunque sea un dedo o emitir un pequeño ruido para comunicarle que todo saldría bien. Pero me sentía tremendamente agotada como para eso. Oigo como Justin solloza y aunque no le veo, sé que está llorando.
-He dejado todo.-Dice acariciando mi mejilla.-Todos me quieren matar pero me da absolutamente lo mismo, cuando despiertes y nos larguemos de este hospital, nos iremos a vivir a una casa juntos, sin problemas, solos tu y yo. Pero tienes que despertarte, tienes que hacerlo por favor. No quiero una vida si no estás tú en ella.
Apoya su cabeza contra mi regazo sin dejar de sostener mi mano. Necesito abrir mis ojos, la sensación de ver como Justin estaba llorando desconsoladamente e intentar decirle que estaba bien pero no podía me enervaba por completo. Intento concentrarme en mover aunque sea un dedo, voy sintiendo un pequeño hormigueo a lo largo de todo mi brazo extendiéndose hasta mi mano y por fin, consigo que mis dedos reaccionen apretando la mano de Justin. No es mucho pero lo suficiente como para que Justin de un salto de la cama y comience a gritar.
-¡Me has apretado la mano!-Exclama.- ¡Oh dios mío! ¡Vanessa! ¡Tengo que decírselo a los enfermeros! 
Da un beso en mi frente y oigo como con pasos apresurados sale de mi habitación. En ese instante, abro los ojos dejando que la luz de la sala me ciegue completamente. Veo borroso pero algo es algo. Enseguida dos hombres vestidos de azul acuden hacia mí, poniéndome una linterna en los ojos y revisándome de arriba a abajo asegurándose de que todo iba bien. Cuando comienzo a ver mejor, me doy cuenta de que un montón de agujas están clavadas en mí y tengo una enorme venda en toda la parte baja del pecho que me aprieta lo suficiente como para que me cueste respirar. También otro trozo de venda rodea mi cabeza, aunque esa no me duele.
-¿Se encuentra bien señorita Britt?-Pregunta un médico mirándome la cara.
Asiento con la cabeza incapaz de hablar. Los dos apuntan algo en sus cuadernos y luego uno de ellos revisa cada uno de los sueros que hay. Después de darme varias indicaciones se marchan, avisándome de que pronto volverían para seguir revisándome. Enseguida que ellos se marchan Justin está a mi lado inclinado, tan cerca de mí que puedo sentir su respiración acelerada junto con sus latidos del corazón desbocados.
-Lo siento muchísimo.-Es lo primero que dice.-Casi te pierdo para siempre.
-No fue tu culpa.-Le respondo forzando mi garganta.- ¿Andrew?
-Muerto.-Me contesta al segundo.-Todo ha terminado, de verdad.
Se coloca a un lado de mi cama para poder estar más cómodo pero sin molestarme. Al final acaba tumbándose al lado de mi a pesar de que la médica le advirtió que se bajara de mi camilla, nos pasamos horas hablando, él me cuenta que estos dos días que he estado inconsciente la gente no paraba de hablar de mi en los medios de comunicación y que Débora ha estado viniendo aquí todos los días, durmiendo a mi lado desde que entré por la puerta. También me relata lo que paso después de que Andrew me disparará, el segundo tiro que oí fue cuando Ryan le disparó a él haciendo un blanco perfecto en su cabeza. Todo por fin había pasado, ya no había nadie que quisiera matar a Justin por venganza o que quisiera herirle.
-Ahora estamos bien.-Le murmuro con mis labios cerca de su cuello.
Sonríe mostrándome su blanca dentadura e inclina su cabeza hacia abajo para encontrarme con la boca entre abierta, plantando un beso sobre ella.
-Ahora estamos bien.-Repite feliz.
Después de estar varios días más encerrada en el hospital siendo revisada cada día por distintos médicos y comiendo a base de sopa, a la semana siguiente me daban el alta por fin. Cuando salí por la puerta de la habitación ya vestida con mi ropa normal y no con la vieja bata azul del hospital, todo el equipo de Justin, sus amigos, Débora junto con Kian y la madre de Justin, estaban allí esperándome con flores y bombones, incluso varios peluches.
-Muchas gracias.-Exclame abrazándoles a cada uno, con las lágrimas a punto de desbordarse por mis ojos.-Gracias por haber estado aquí.
-No es nada.-Responde Christian estrechando el brazo de su hermana, Caitlin Beadles.-A partir de ahora.
-Estamos bien.-Añade Justin agarrándome por la cintura. Me mira.- ¿Vamos nena?
Asiento sonriéndole. De aquí íbamos a su casa, bueno, nuestra nueva casa. No sabía absolutamente nada sobre cómo era o donde se encontraba, pero todos me decían que me iba a encantar. Cuando recojo todos los regalos y me despido de la gente cariñosamente, entro en el auto de Justin junto con Debora y Kian, estos con una pícara sonrisa entre sus labios.
-¿Estas nerviosa?-Me pregunta Debi.
-Ajá.-Asiento.
-Vas a flipar.-Añade Kian riendo.
Ellos dos por fin se habían reconciliado, menos mal porque si no tendría que estar aguantando las rabietas y llantos de mi amiga por mucho tiempo. Suspiro acomodándome en el asiento, llevábamos veinte minutos de coche y parecía eterno el camino. Pero por fin llegamos, después de otros diez minutos más. Mi corazón se aceleró mientras bajaba. Sólo con ver el paisaje ya me encantaba, era una casa considerablemente grande entre un montón de árboles y arbustos verdes. A pocos metros de esta casa había otra y a kilómetros muchas más.
-¿Sabes quién vive ahí?-Pregunta mi amiga señalando la casa alejada.- ¡Yo! ¡Y Kian! ¡Chócala! ¡Somos vecinas!
-No me jodas.-Exclamo riendo con ella.- ¡Es fantástico, no me lo puedo creer!
-¿Quieres entrar Britt?-Me grita Justin ya en la puerta.
El novio de mi amiga me ayuda con las maletas hasta la entrada, luego ellos dos se van a empaquetar sus cosas pero sabía que en menos de dos horas los volvería a ver de nuevo. Esto era absolutamente genial, perfecto. Como en un cuento. Biebs me tiende la llave en mis manos y la meto en la cerradura, dándole dos vueltas hasta que se abre. Tal y como había predicho, la casa era considerablemente enorme.
-¿Te gusta?-Susurra Justin a espaldas de mí.
-Dios.-Me giro.-La amo, es enorme.
Un gato color café descansa en las escaleras mirándome con una expresión seria pero a la vez divertida. Paso adentro de la casa para mirar todas y cada una de las habitaciones, cada una más perfecta que la anterior, de seguro le habría costado una millonada a Justin. Cuando llegamos por ultimo a nuestra habitación, me quedo asombrada de lo enorme y lujosa que es. Sin querer, estoy llorando.
-Esto es demasiado.-Le digo a Justin dirigiéndome hasta él.-Gracias.
Agarro su cara entre mis finas manos atrayéndolo hacia mí para besarle durante un buen rato, saboreando sus carnosos labios que no probaba desde tiempo, por una vez en la vida sintiéndome completa, gracias a él.
-¿Estamos bien?-Pregunta apretando su agarre en mi cintura.
-Estamos bien.-Le repito con una sonrisa en mi rostro.
Y de nuevo, nuestros labios se vuelven a sellar.

FIN.
------------------------------------------------------------------------------------------
Bueno, no sé si leeréis esto o no pero espero que lo hagáis. De verdad os juro que estoy llorando, que son once meses escribiendo Let me love you, soñando cada día con vosotras, escapando del mundo y por supuesto, esto no hubiera sido posible sin todas vosotras que habéis estado leyendo esta novela hasta el final. Muchísimas gracias por todo y hacerme tan feliz, os juro que no creí que Let me love you la leyera tanta gente, porque empecé avisando a tres personas y he terminado avisando a 74, que antes llegaba a las 100 visitas en una semana y ahora blincan las 300 en dos días. Muchísimas gracias de verdad.
Deciros que no voy a dejar de escribir, ya tengo una novela en mente y que no tardaré en subirla, ojalá os guste. Cuando publique el capítulo os seguiré avisando a las mismas que en Let me love you, pero si alguna quiere que no la avise o que no la avisaba y ahora quiere que la avise, pues que me lo diga ¿sí? Os lo agradecería millones.
Y eso es todo, nos vemos muy muy pronto en mi próxima novela “Fire and Ice”
TRAILER DE FIRE AND ICE: 

 PD: SI LEÍSTE EL CAPITULO NO TE OLVIDES DE DARLE RT AL LINK QUE HAY JUSTO DEBAJO DE LA IMAGEN DE ARRIBA DEL CAPITULO. GRACIAS.


1 comentario:

  1. Vale, me estoy leyendo fire and ice y luego encontré let me love you. ME HE LEÍDO LA NOVELA EN 2 DÍAS. OSEA, NO ES NORMAL, PERO SÍ, ME LA HE LEÍDO Y ME ENCANTAN LAS DOS ASDFGHJKLÑ

    ResponderEliminar